Las proyecciones financieras son una gran herramienta que se utiliza en la gestión financiera. Partiendo de una serie de supuestos se logran crear escenarios con diferentes realidades.
Un presupuesto es un documento que se desarrolla a partir de las previsiones de ingresos y egresos monetarios para un cierto periodo. Su finalidad suele ser el cálculo del dinero necesario para poner en marcha un proyecto, concretar una acción, etc.
Los ingresos, por su parte, se forman por los caudales que entran a las arcas de una empresa, una entidad o un sujeto. Se trata del dinero que llega al poder de alguien a partir, por lo general, del desarrollo de una actividad laboral, productiva, financiera o comercial.
De esta forma, podemos proceder a elaborar la definición de presupuesto de ingresos, el cual se basa en las ventas logradas en el pasado y en las expectativas respecto a próximas actividades comerciales. Mientras que los primeros datos son concretos, las previsiones deben estimarse con realismo y teniendo en cuenta diversos factores que incidirán sobre los potenciales ingresos, como la situación económica del país o los países en los cuales se desea operar, el estado de la demanda y la fortaleza de la competencia.
El presupuesto de ingresos es muy importante ya que de los ingresos que se concreten dependerán las ganancias. De los ingresos totales, se deben descontar luego los costos de producción y los diferentes gastos para así conocer los beneficios o las pérdidas. Por lo tanto, un presupuesto de ingresos bien realizado es clave para prever si un determinado proyecto será rentable o no.
El presupuesto de ingresos, por otra parte, es imprescindible para saber si la organización en cuestión podrá hacer frente a los montos que aparecen en el presupuesto de gastos, el cual puede definirse como la información relacionada con el importe que la entidad puede gastar en un periodo determinado y un detalle del uso que hará de el dinero. El presupuesto de gastos no sólo debe elaborarse sino aprobarse para tener validez.
Los importes que se encuentran en el presupuesto de ingresos reciben el nombre de créditos. A diferencia del presupuesto de gastos, éste se ejecuta por el monto que efectivamente perciba la organización en el año, independientemente de los números que se hayan previsto obtener inicialmente. Cabe mencionar que el período de ambos presupuestos debe ser el mismo, puesto que el de ingresos sirve para llevar a cabo las adquisiciones estipuladas en el de gastos.
Cuando las actividades comerciales que se realizarán durante el año ya han sido efectuadas anteriormente, la confección del presupuesto de ingresos es más sencilla que cuando se asumen riesgos tales como la publicación de un nuevo producto o servicio. Esto no quiere decir que las predicciones acerca de un caso conocido siempre ofrezcan más seguridad que una apuesta fuera de lo común; no debe olvidarse que el mercado es impredecible.
A pesar del inevitable riesgo que debe enfrentar toda compañía cuando elabora un presupuesto de ingresos, gracias a Internet es posible tomar mejores decisiones para aumentar las probabilidades de alcanzar sus objetivos. Uno de los elementos principales es el feedback de los clientes, que engloba tanto las quejas como las valoraciones positivas acerca de sus productos y servicios, algo que (con esta magnitud) resultaba imposible hace no tanto tiempo. En otras palabras, si un gran porcentaje de los consumidores responde negativamente ante un artículo, no sería un buen plan confiar en sus ventas para cumplir con el presupuesto de ingresos.
Por otro lado se encuentran las ideas y deseos de los consumidores con respecto a los planes futuros de la firma. Aunque también podrían considerarse parte del feedback, se trata de información mucho más precisa y definida acerca de sus necesidades. Nunca es posible satisfacer a todos los clientes, pero demostrarles que sus palabras son tenidas en cuenta siempre trae resultados positivos.
Comentarios
Publicar un comentario